El verdadero proposito de la meditación Budista.


¿Cuál es el proposito de la meditación Budista?

La práctica de la meditación es realizada con el propósito de realizar el nirvana y por tanto escapar de los males inherentes de la vida: el envejecimiento, la enfermedad, la muerte, etcétera.

Impermanencia

Un monje reflexiona sobre la impermanencia del cuerpo.

Todos los seres vivientes desean vivir sin causar daño, en paz, felizmente y de manera prospera sin sufrir del envejecimiento, la enfermedad, la muerte y demás males de la vida; más sin embargo esta esperanza siempre resulta ser en vano. Ya que en toda vida se encuentra presente el envejecimiento, la enfermedad, la pena y la lamentación debido a la presencia de muchos peligros y maldades, sufrimiento físico y dolor mental. Y luego de sufrir terribles suplicios y agonías viene a continuación la muerte. Más sin embargo no hay un final en la muerte. Hay, nuevamente, nacimiento debido a los apegos. Y en esta nueva vida son nuevamente victimas del envejecimiento y otros males. De este modo repiten el ciclo del renacimiento de una vida a la siguiente, sufriendo todas clases de vicisitudes sin parar.

En la búsqueda de la causa raíz de este estado de sucesos resulta evidente que ‘debido a que hay nacimiento estamos encadenados al envejecimiento, la enfermedad, la muerte y los demás males de la vida.’ Por lo que es esencial prevenir el nacimiento si los males de la vida tales como el envejecimiento, etcétera, son de evitar.

Renacer solo puede tomar lugar debido al apego inherente en la presente vida. El nuevo nacimiento no es nada más que el surgir de una nueva conciencia la cual es el resultado de aferrarse a un objeto sensorial durante el momento de la muerte de la vida previa. Donde no existe ningún apego no puede existir ningún renacimiento; por lo que todo esfuerzo debe ser realizado para liberarnos del apego si ningún nuevo nacimiento es deseado.

proposito de la meditación budista

Este apego a la vida puede persistir por dos razones, primeramente por no percibir los males de la mente y el cuerpo, y segundo al no darse cuenta de que el nirvana es mucho más superior. Por ejemplo, es como el caso de una persona viviendo en un país estéril y desolado el cual está lleno de peligros. Él naturalmente piensa muy bien de su país y posee un gran apego al mismo debido a que este realmente no posee un ningún conocimiento real de los defectos de su país o de alguna condición mejor en algún otro lugar. Si este llega a conocer todos los hechos, su país no le atraerá más y este estará listo para moverse inmediatamente al nuevo país. Similarmente, es esencial tratar de percibir los males de la mente y el cuerpo que constituyen esta vida y entender de manera personal la superioridad del nirvana, con la visión de remover totalmente el apego a la vida. Este conocimiento puede ser adquirido a través de una apropiada práctica de la meditación. Por tanto, toda persona que esté deseosa de escapar de los males del envejecimiento, la muerte, etcétera, y de realizar personalmente el nirvana debería de llevar a cabo la práctica de la meditación.

Fuente:

Ryokan Opina

El venerable Mahasi Sayadaw proporciona una definición canónica del verdadero proposito de la meditación Budista. Y es que hoy en día, en la era del ‘lo quiero aquí y ahora’, se tiende a realizar más énfasis en los beneficios inmediatos o a corto plazo de la práctica, olvidando por completo el sentido real de la misma.

Sin embargo, el Budismo siempre es flexible en sus exposiciones, si bien el objetivo esencial de la práctica es alcanzar el estado último del nirvana, dado que éste es un aspecto que inicialmente requiere de la cualidad de la fé (ya que debe ser realizado personalmente para su entendimiento), se ve como válido transferir el énfasis a otros beneficios más fácilmente perceptibles por aquellos que no son adeptos al Budismo (y por ende carecen de la cualidad de la fé en la enseñanza del Buda). Ya que, a pesar de que la motivación no sea completamente pura, siempre es más beneficiosa una práctica basada en objetivos superficiales que ninguna práctica en lo absoluto.

Es debido a esto, es que existen muchos grupos de meditación Budista que han abierto sus puertas a miembros de otras religiones. La naturaleza compasiva del Budismo es abierta a todos los seres, si podemos compartir un poco de felicidad y paz con otros, es nuestro deber como Budistas hacerlo.

'La felicidad nunca decrece al ser compartida.' - Buda

Por último, podemos afirmar que las motivaciones varían en el tiempo de acuerdo a nuestro nivel de maduración y comprensión. Si en un inicio alguien medita debido a que es relajante, no quiere decir que más adelante no realice un motivo superior, la exposición a la práctica le habilita de reconocer la naturaleza básica del ser humano y la vida, y a raíz de esta realización, su motivación primaria cambia completamente, acercando a este al camino de la liberación última.

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